YO NACÍ EN UNA TIERRA CALIENTE

Yo nací en una tierra
caliente,
de luz e ilusión,
donde el sol
va a acostarse
en las tardes
y se hace más sol.

Yo nací en una tierra
de ensueño
y proezas históricas,
donde existen
recuerdos de héroes,
castillos, palacios
y bellas historias.

Yo nací en una tierra
entrañable,
de fantasía heroica,
donde nadie
se siente un extraño,
si en ella se aloja.

Yo nací en una tierra
afamada
por su simpatía,
y por ser cuna
de hombres que hicieron
el mundo pequeño
con sus aventuras.

Yo nací en una tierra
tranquila,
de ensueño y delicia,
que eligió el dueño de un imperio
para terminar
en ella sus días.

Yo nací en una tierra
cortés,
heroica y sencilla,
elogiada por quienes conocen
que nunca fue extrema
ni dura.

Fue el avance de gentes del Norte
en Extrema Douri,
acercándose al Tajo
y al Betis
y dejando su huella
en los nombres.

Yo nací en una tierra
de hidalgos
y hospitalidad,
donde anidan siempre
las cigüeñas,
que ponen sus nidos
sólo donde hay paz.
(De Campos de Sol)